Una secuela espiritual… ¿que está bien hecha?
¡ALERTA SPOILERS! (de los 6 primeros capítulos)

No voy a mentir. Cuando supe de que iban a sacar la continuación de Inuyasha después de muchos años… me dio una mezcla de emoción y miedo. Desde hace tiempo que vivo tragando las historias de los hijos de X e Y en tal anime o manga, pero (¡para colmo!) mal hechos; o que solo sirven para sacar dinero a una franquicia como si fuera una vaca para hacer dinero. Lo siento, pero Boruto me parece una mala secuela espiritual, la hija de Meliodas y Elizabeth me parece un mal diseño (¡Por favor! ¡Es una imagen de Elizabeth pequeña con cara de Meliodas y ojos de diferente color! ¡La creatividad se fue por el tacho!) y no pienso tragarme animes completos que no he visto solo para entender el universo de sus hijos para sus futuras historias.

Sin embargo, cuando se trata de Inuyasha… No tengo idea de por qué mi curiosidad es más grande. Inuyasha forma parte de mi infancia. Lo veía de vez en cuando en Cartoon Network y, sin bien no entendía nada, me llamaba la atención ese grupo variopinto que cazaba demonios y debían proteger una perla rosada. Ya de adolescente decidí verla completa. Y amé cada momento. Fue justamente Inuyasha que me obligó a buscar el anime en japonés para saber cómo continuaba. Y no me arrepiento.

Y ahora, Rumiko Takahasi, la creadora de este anime y muchos otros, hizo el diseño de las tres protagonistas y está detrás de la secuela. La curiosidad pudo más.

Y este anime comienza (conocido como Yasahahime: Princess Half-Demon)… con un recuento de los personajes. Como si hubiéramos olvidado de ellos, el anime adapta el último capítulo que salió del manga. Solo de antesala para luego presentarte la verdadera trama en el segundo capítulo.

La historia sigue a Towa Higurashi y Setsuna, ambas hijas hanyou (o medio demonio) de Sesshomaru, el medio hermano mayor del protagonista masculino del anime anterior.  Ambas han vivido sus primeros años de vida solas en el bosque, pero un incendio provoca que las dos niñas se separen y, por culpa de la perla plateada en el ojo de Towa (¿Cómo es que llegó eso ahí?) la manda al futuro, donde es criada por el Touya, el hermano menor de Kagome, la protagonista femenina del anime anterior. Mientras tanto, Setsuna se queda en el periodo Sengoku y vive con los cazadores de demonios. Diez años en el futuro, por culpa de una mujer ciempiés y con la aparición de Moroha, la hija de Inuyasha y Kagome, viajan al futuro donde conocen a Towa y logran derrotar al monstruo. Por culpa del monstruo del capítulo 1 (la raíz devoracabezas) pueden viajar al pasado, donde el Árbol de las Edades les da una misión: matar al general demonio Kirinmaru que planea destruir la paz… y a su padre Sesshomaru, como el hijo mayor de su padre y quien se negó a tomar su puesto de general demonio. Las tres chicas se niegan, pero se quedan varadas en la época feudal hasta lograr una forma de conseguir sus propias misiones.

Creo que lo más bonito es volver a sentir esa emoción al ver Inuyasha. Los personajes de la serie original hacen sus apariciones de vez en cuando y las tres protagonistas cumplen su trabajo como tres puntos de vista distinto. Es claro que cada una tiene lo suyo.

Posiblemente quien no te caiga muy bien sea Towa (o al menos, ese es mi problema). Su visión moderno e inocente es como una piedra en el zapato, pero sabes que tiene su valor y cumple su misión de llevar parte de la trama. Setsuna, en cambio, es lo más parecido a su padre: seria, enfocada en su misión, pero que tiene su corazoncito que hace que la quieras. Moroha es el caso de en medio. Es una mezcla interesante de sus dos padres, pero no llega a caer tan insoportable, lleva el papel de la comicidad muy bien logrado.

Claro, hay preguntas que yo misma me hago al ver esta trama. Como, por ejemplo: ¿Qué pasó con Inuyasha y Kagome? ¿Cuál es la situación de Rin (quien está confirmado que es la madre de las gemelas)? ¿Algún día volveremos al presente (pues está confirmado de que pueden viajar en el tiempo)?

Tal vez el elemento más reciclado es el de las perlas arcoíris. Como ya no podían usar la perla de Shikon, el McGuffin de la serie original, tuvieron que usar otro elemento de similar poder para que moviera la trama. Pero de paso reutilizar a Kikyo me pareció un elemento que ya cansa. Esa sacerdotisa deberían dejarla descansar, ya parece que la reciclan para todo. Y no solo eso, sino que, para algunas partes de la trama, están reciclando arcos del manga que asumo se podían adaptar para las niñas. Bueno… al menos siguen la trama de la misma autora.

Con respecto a la comedia… no sabría decir. Por momentos funciona, pero otros no. Es como si trataran de balancear elementos que podrían funcionar en un público actual junto con tocar ciertos elementos de nostalgia.

Si hay algo que me fastidia mucho cuando veo este anime, debo admitir que es la presencia de los nombres que salen al principio de cada capítulo, casi como lo hacen en el anime Boku no Hero Academia. ¡A cada rato! Como si nos olvidáramos de quiénes son de un capítulo para otro. No necesitamos de apoyo visual, gracias.

Si tuviera que resumirlo en pocas palabras… El anime es un ataque a la nostalgia, pero con ciertos elementos nuevos, con una comedia que más o menos funciona, y la misma acción que nos enamoró cuando veíamos Inuyasha. El misterio de ciertos elementos hará que te quieras quedar para terminarla. No es lo mejor de la temporada, pero sí es algo que vale la pena darle un vistazo.

Puntuación final: Funciona.

Mírala si te gusta:

• La fantasía
• La acción
• La violencia
• La comedia
• Viajes en el tiempo (?)
• La nostalgia por Inuyasha
• El clásico viaje de tres personajes en una misión