Logrando una armonía precisa entre la herencia británica y la pasión china por la innovación, MG Motor ha consolidado su estatus como una marca automotriz que engloba atributos de calidad, seguridad, permanencia en el mercado y una sólida inversión en tecnología a nivel global.

Desde sus inicios en Oxford, Inglaterra, MG ha trascendido a lo largo de más de 80 años, combinando su legado británico con la sólida inversión respaldada por el gigante automotriz SAIC Motor y distribuida localmente por el Grupo Astara. Este vínculo de origen ha sido el cimiento sobre el cual MG ha evolucionado, enfrentando los desafíos cambiantes de la Revolución Industrial para convertirse en una fábrica de automóviles que se integra hábilmente en el estilo de vida confiable, económico y entretenido de sus conductores.

Jim Alvarado, Gerente de MG Motor en Perú, indica que la síntesis de tecnología y compromiso se manifiesta en la inversión que MG realiza en la fabricación de vehículos. Desde la concepción hasta la realización del diseño final, transcurren alrededor de 5 años de meticuloso desarrollo.

La Tecnología de Hidrógeno es uno de los pilares de la innovación en MG. Al adoptar el hidrógeno como fuente de energía en lugar de los convencionales combustibles fósiles, MG abre la puerta a una movilidad más sostenible. Mediante celdas de combustible, el hidrógeno se convierte en electricidad a través de una reacción química con el oxígeno, produciendo únicamente agua como subproducto. Esta alternativa representa una medida impactante para reducir las emisiones de carbono en comparación con los motores de combustión interna.

La visión de MG no se detiene ahí, sino que avanza hacia la Conducción Autónoma. La marca británica ha estado a la vanguardia de la implementación de esta tecnología, llevando a cabo desarrollos que permiten a los vehículos operar sin intervención humana en condiciones específicas. A través de sensores, cámaras, radares y sistemas de control avanzados, MG se sitúa en la categoría de las tecnologías de conducción autónoma, clasificadas por la Sociedad de Ingenieros Automotrices (SAE) en niveles del 0 al 5. Esta gama abarca desde la ausencia de automatización hasta una conducción completamente autónoma en todas las circunstancias.

Así la fusión de tradición y tecnología en MG cumple su promesa de un futuro en el que la calidad, la seguridad y el respeto por el medio ambiente convergen en cada giro del volante.